Siempre en el arte se habla sobre el lenguaje propio del artista, ese “algo” que lo define, y esto se refiere a términos muy subjetivos, Ya que los artistas que poseen un lenguaje claro no dan lugar a dudas cuando los vemos de quienes son, de esta manera podemos enumerar una larga lista de los aspectos que hacen único el estilo de un artista, pero jamás podremos definir qué es.
Hay algo que tengo muy claro de el lenguaje personal manifestado en las artes, y es que nada tiene que ver con un pensamiento, no es algo que se busque, no es racional de ninguna manera.
Cuando un artista vive una experiencia de creación estética verdadera el producto queda tan empapado de su ser que no puede nacer algo diferente a la propia esencia del artista, como ese accidente que hizo que existiera como un ser único e irrepetible.

Año: 2009.
Técnica: Ensamblaje en aluminio y madera
Es un proceso en donde se debe expresar con libertad, esto quiere decir que no debe supeditarse ninguna acción de su creación a juicio alguno, bonito, feo, excéntrico, se parece a tal o a cuál, etc., etc., etc. se debe hacer y simplemente hacer, dejar paso a sus sentimientos y su ser con su cabeza diciéndole simplemente como construir para que pueda existir, sin decir a cada paso imaginando un futuro , un pasado o un quiero que sea.

Ensamblaje en aluminio
Medidas variables (max 180 x 60 cm)
Año 2008
La creación está llena de miedos, miedo a la exposición, miedo al fracaso, a no ser original, miedos ligados a pensamientos, a experiencias pasadas, miedos que cargamos en la vida, el artista se expone al crear y eso da miedo, pero, si en el momento de crear no somos capaces de separarnos de esto nos coartamos nosotros mismos nuestra libertad, creando un ser incompleto, bien sea en una escultura, una pintura, una partitura, una poesía.
Cuando uno logra hacer una pieza sincera, fiel al universo que es uno como individuo, se convierte en una extensión de uno mismo, por ende, estamos empapados en ella transformándose en nuestro propio reflejo.

Raquel Zoco
Artista y escultora formada en el instituto Armando Reverón de su Venezuela natal en 2003 viaja a Valencia, España, dónde desarrolla su arte en el entorno europeo alimentándose de nuevas influencias internacionales y su trabajo recibe reconocimientos y galardones.
En el año de 2009 regresa a Venezuela y refuerza su exploración de la joyería contemporánea, interpretando las formas de la naturaleza en sus piezas. Desde 2018 radica en México y decide hacer accesible su marca de joyas al mercado local.